En 1989, Tim Berners-Lee desarrolló el concepto de la World Wide Web en el CERN. La primera página web se publicó en 1991, y en 1993, la Web se abrió al público, marcando el inicio de una nueva era de información y comunicación.
El número de usuarios de internet creció exponencialmente, convirtiéndose en una fuente invaluable de información y permitiendo el comercio electrónico. Esta expansión impulsó la innovación en diversas áreas tecnológicas.
Las redes inalámbricas, como Wi-Fi, y las redes móviles, basadas en tecnologías como GSM y LTE, revolucionaron la comunicación al permitir el acceso a internet sin cables y desde dispositivos móviles.
Los estándares de comunicación, como Ethernet, Wi-Fi y 5G, han evolucionado para ofrecer velocidades más rápidas y menor latencia, mejorando la conectividad en redes locales y móviles.
Los desafíos actuales incluyen la seguridad cibernética, la privacidad, la conectividad universal y el Internet de las Cosas (IoT), que está generando nuevas oportunidades y desafíos en la conectividad.